Aunque nacido en Tolosa (Gipuzkoa), Koldo ha vivido la mayor parte de su vida en Pamplona. Su afición por la gastronomía no vino de la nada, y es que este cocinero ha crecido entre fogones desde su más tierna infancia; incluso sus padres se conocieron trabajando en un restaurante, El Guría de Barcelona. 

 

Koldo entró a trabajar en el comedor del restaurante de su padre, el cual regenta actualmente, pero al poco dejó las bandejas para meterse de lleno en la cocina, donde encontró su verdadera vocación. 

 

Siguiendo la estela de su padre (un gran innovador de la cocina navarra, ya que fue el primer navarro que comenzó a aplicar el foie o la nata a sus platos), Koldo ha optado por acercarse a la vanguardia gastronómica pero conservando la esencia de la comida más tradicional de Navarra.